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Narcotráfico I

En los últimos tiempos en los medios han tomado especial importancia todos los temas relacionados con el narcotráfico tratados, la mayor parte de las veces, en forma parcializada y sin dar un diagnóstico de la situación de la evolución, la actualidad y el futuro de este flagelo. En el segundo semestre de 2012 tuve la oportunidad de ser invitado a participar con un grupo de prospectivistas y expertos en narcotráfico en un estudio prospectivo financiado por el Programa de las Naciones Unidads para el Desarrollo (PNUD) denominado "Evolución del narcotráfico en la Argentina al 2020". Publicaré aquí algunas partes del extenso documento mencionado que estimo pueden resultar de interés para quienes estén preocupados con este flagelo.


Aquí van:
" La Oficina contra la Droga y el Delito de la ONU, en su “Informe Mundial sobre las Drogas” de 2012, estima que el 0,6% de la población adulta mundial ha consumido, al menos una vez, algún tipo de droga durante el año 2010, otorgándole dimensión multinacional al problema.

En su Resumen Ejecutivo
 la UNODC destaca que el volumen de consumo mundial de drogas ilícitas “se mantuvo estable durante cinco años hasta finales de 2010 en un 3,4% y el 6,6% de la población adulta (personas de 15 a64 años). Asimismo menciona que “entre un 10% y un 13% de los usuarios de drogas siguen siendo consumidores problemáticos con drogadependencia y/o trastornos relacionados con el consumo de drogas”.

Sin embargo, no son solo los individuos los que se ven afectados por este fenómeno. Todo tipo de organizaciones e instituciones e incluso Estados, se ven conmovidos profundamente dado que el narcotráfico corroe la institucionalidad mediante la corrupción política, social, judicial y policial.

La criminalidad asociada al narcotráfico tiene asimismo efectos nocivos en los miembros no consumidores de la sociedad, dada la violencia que estos sectores deben soportar, producto de la delincuencia que se instala en cada una de las etapas de proceso que finaliza en el consumo de los distintos tipos de drogas: producción, fabricación, transporte y comercialización, todo ello apuntando al consumo.

La sociedad no solo ve aumentar los delitos asociados, con una alta tasa de violencia y el consiguiente aumento de la criminalidad por efectos del narcomenudeo, las disputas territoriales y los delitos cometidos por los consumidores de drogas en búsqueda del dinero necesario para satisfacer sus adicciones. También se ve afectada en los aspectos relacionados con las consecuencias indirectas del consumo por parte de  los drogadependientes.

La respuesta al problema del narcotráfico recomendada por
 la UNODC centra su atención en “elaborar un enfoque integrado” y en “la prevención, el tratamiento, el desarrollo alternativo y la promoción de los derechos humanos fundamentales”.

A pesar de los enormes esfuerzos realizados, el informe mencionado reconoce que la producción y el consumo global de drogas ha registrado una tendencia creciente en términos generales y sin discriminar por drogas o regiones involucradas que, a su vez, afecta a un número creciente de ciudadanos no involucrados en el narcotráfico o el consumo y que deben sufrir involuntariamente las consecuencias de estos delitos.

Reconocemos que es imprescindible la cooperación internacional para lograr una disminución, -sostenida en el tiempo- de la producción y consumo de drogas, en cada una de las etapas involucradas, desde los cultivos o elaboración de insumos básicos hasta el microtráfico y el narcomenudeo, de la I&D hasta la comercialización de nuevas drogas sintéticas, así como en la prevención y la recuperación de los drogadependientes.

Sin embargo y más allá de los esfuerzos realizados en todos los órdenes en el enfoque integrado y la prevención, el tratamiento, el desarrollo alternativo y la promoción de los derechos humanos fundamentales creemos que es necesario impulsar un nuevo esfuerzo en el tratamiento estratégico del narcotráfico: la
 “anticipación estratégica”.

La “industria” del narcotráfico ha evolucionado desde organizaciones basadas y sustentadas en la violencia a organizaciones cada vez más profesionalizadas y tecnificadas, en las que a pesar de que el componente “ejercicio de la violencia” sigue presente, su operación se basa en el conocimiento y la aplicación de conceptos y metodologías propias de la empresa moderna. Esta combinación, violencia y conocimiento (a lo que se suma la enorme disponibilidad financiera), resulta ser más compleja de combatir que aquellas en la que basta la aplicación de la fuerza pública, solución que hasta el presente ha resultado solo en éxitos parciales y temporarios y no presenta efectos definitivos.

A la evolución hacia una operatoria más cercana a la de la empresa moderna se suma el conjunto de características propias de esta operatoria que dificultan en grado sumo su tratamiento por parte del Estado.

La multiplicidad de las fuentes de insumos, los distintos tipos de drogas, la diversidad de operadores en cada etapa de la producción y comercialización, la tercerización de la operación a organizaciones criminales especializadas, la cantidad de países involucrados, el importante volumen financiero a nivel global del que dispone, el ingreso en operaciones legales de parte de sus ingresos, la corrupción generalizada que provoca en todos los niveles de los Estados afectados, la magnitud de los medios de los que dispone, los altos niveles de violencia que ejercen en las etapas finales del proceso, la asociación con grupos armados para el control de las áreas de producción, la evolución y creación permanente de nuevos productos, el empleo por parte de las organizaciones de cuadros profesionales en la estructura administrativa, de I&D, de seguridad e inteligencia provocan que los Estados se vean, casi en forma permanente, a la defensiva, reaccionando a los desafíos que le propone el narcotráfico.

Pareciera que el narcotráfico es dueño de la iniciativa, lo que en términos estratégicos significa, ni más ni menos “libertad de acción”, y como se comprueba, en manos del criminal.

Por lo expuesto, surge de inmediato que el narcotráfico resulta ser un tema extremadamente importante, complejo y multidimensional cuyo abordaje ha de ser, necesariamente, integral para lograr reducirlo a niveles en los que sus efectos sean asimilables.

Este enfoque,  tal como lo propone
 la Oficina contra la Droga y el Delito de las Naciones Unidas,  debe considerar en su solución al conjunto de los delincuentes, al delito, a las víctimas directas e indirectas, a la legislación, a la estructura y a los medios para combatirlo.

Advertimos que por sobre las urgencias a que obliga la realidad de este fenómeno, debería sumarse al enfoque de corto plazo una visión de largo plazo, estratégica, integral y multidimensional que permita a las autoridades anticiparse, restringiendo seriamente la libertad de acción del narcotráfico y, como consecuencia, limitando sus opciones. De esta forma los narcodelincuentes deberán optar por desarrollar sus operaciones hacia  alternativas más desfavorables para sus conveniencias, y en algunos casos, abandonarlas.

Al caracterizarse las estructuras y la operación del narcotráfico por una constante evolución y adaptación a las circunstancias y dinámica de los mercados, ninguna solución táctica que se les oponga será eficaz durante períodos de tiempo sostenidos, y mucho menos probable es que logre ser una solución definitiva. 

En otras palabras, los Estados deberán adaptar sus estructuras para enfrentar la problemática del narcotráfico tanto como para dar apoyo a las víctimas de un adversario criminal dinámico que, definitivamente, evitará confrontar a “campo abierto” en un enfrentamiento  definitivo.

Al logro sostenido en el tiempo de una eficaz “anticipación estratégica”,
 el Estado deberá sumar la capacidad (compleja por cierto) de enfrentar el desafío imponiendo los términos (las reglas de juego) que le permitan retomar la iniciativa. El conjunto completo de la estructura funcional que permita este logro (organismos, recursos humanos y materiales, y todo lo necesario para su funcionamiento eficiente) debería depender directamente de la más alta autoridad política a fin de poseer la independencia, autonomía, dirección centralizada y velocidad en el accionar.

Una medida de relevancia debe dirigirse a introducir mejoras funcionales y de competencias en el procedimiento judicial y en la capacitación especializadas de Fiscales entrenados en el conocimiento empírico del modo de actuación de las organizaciones criminales y el estudio de las respuestas que han mostrado alguna eficacia en el contexto internacional.

Las acciones requieren una complementación con la disposición de sólidas capacidades de inteligencia criminal e inteligencia estratégica sobre el Crimen y otras áreas de la seguridad ciudadana, disponibilidades tecnológicas de gestión de la información centralizada en un órgano de análisis específico e independiente y no comprometido con el empeño operacional de fuerzas de seguridad y policías.

Debería poseer capacidad material de avanzada (incluyendo obviamente tecnología de punta) y los recursos humanos profesionales para realizar la mencionada inteligencia, coordinando, supervisando, analizando y distribuyendo, cuando corresponda, toda la información relativa a la narcodelincuencia de y a todos los organismos de inteligencia  federales y provinciales. 

En orden a los elementos policiales y de seguridad que se empeñen en roles de prevención y persecución penal de estos delitos, se requieren medidas de innovación tanto en su orgánica como en la formación en estos temas. La orgánica debe también responder a la amenaza que enfrenta y  por tanto el policía, con formación general, no es idóneo al no poseer condiciones de información y criterios para discernir la complejidad  de, por ejemplo, el lavado de activos o las penetraciones corrompiendo niveles diversos en el Estado.

Del mismo modo, la conducción operacional requiere una centralización con injerencia inmediata del Ministro del área, asistido por un órgano de planeamiento y control que se constituya en un modelo de Estado Mayor donde participen funcionarios de alto rango de cada fuerza y especialistas civiles de reconocidas calidades. Siendo Argentina un Estado Federal, podrá requerirse con el propósito de coordinación,  el concurso de representantes de las policías estaduales con mayores demandas de prevención (Buenos Aires, Capital Federal, Jujuy, Salta, Formosa, Misiones, Corrientes, Entre Ríos, Santa Fe, Córdoba, Mendoza y algunas provincias en contacto con el Mar.

Además, con el propósito de dar respuesta inmediata a la operación contra el  narcotráfico, la organización responsable debería poseer medios y personal propios, altamente especializados y capacitados, para intervenir directamente cuando sea necesario y cuando sus capacidades se vean superadas, poseer autoridad suficiente que le permita solicitar el empleo de fuerzas de seguridad en los procedimientos que así lo ameriten. Para ello debería centralizar y coordinar todos los esfuerzos de las fuerzas de seguridad, federales y provinciales, oficiando de integrador y coordinador de todas las acciones contra el narcotráfico.

¿Qué oportunidades nos ofrece la prospectiva estratégica en la lucha contra el narcotráfico? La
 anticipación estratégica que se ha mencionado en reiteradas oportunidades solo es alcanzable y realizable mediante la aplicación directa y específica de la prospectiva estratégica, orientada y adaptada instrumental y metodológicamente a estas aplicaciones.

En nuestra región, la Policía Nacional de Colombia  como Institución en su conjunto, y es particular sus áreas dedicadas a la Inteligencia (DIPOL, DIGIN, otras) han incorporado y adaptado la metodología de prospectiva estratégica a sus necesidades y funcionalidades, con probado éxito. Al extremo de haber creado el CIPRO, Centro de Inteligencia Prospectiva dedicado totalmente a investigaciones –con dicha metodología- de mediano y largo plazos.

También lo han hecho los sistemas de Inteligencia de España y Francia, en distintas formas de acuerdo a sus organizaciones, pero con muy buenos resultados.

Se tiene información que la nueva gestión presidencial de México estaría poniendo fuerte énfasis en la Inteligencia de Anticipación (actividad propia de la prospectiva).

De la misma manera, dos organizaciones regionales dedicadas a la Inteligencia Antidrogas (CICAD, en OEA y ERCAIAD –Escuela Regional de la Comunidad andina de Inteligencia Antidrogas) incorporaron la prospectiva estratégica en sus cursos de capacitación para funcionarios de dicha área hace ya varios años, y en  los planes para el 2013 tienen previsto incrementar dicha capacitación.

En pocas palabras, la prospectiva estratégica permite (entre otras cosas):

a.     Identificar temprana y adecuadamente  los riesgos y oportunidades a futuro antes que los primeros terminen por convertirse en amenazas o hechos críticos.
b.    Evitar de esta manera que la libertad de acción que hoy maneja el narcotráfico siga convirtiéndose en mayores costos en vidas humanas y materiales por la relativa capacidad de respuesta de tenor reactivo que se opera en la actualidad.
c.      Elaborar claros y eficientes Sistemas de Alerta Temprana que permitan actuar antes de los hechos y de los cambios, y recuperar para el Estado la Libertad de Acción.
d.      Realizar un eficiente seguimiento y actualización constante del complejo fenómeno del narcotráfico y de los actores involucrados. 
e.       Analizar y evaluar anticipadamente diversos escenarios de futuro, incluyendo escenarios críticos y –según el léxico habitual de esta disciplina- y escenarios catástrofe, para determinar las posibles consecuencias del “no hacer” o del “hacer poco y mal”.
f.       Anticiparse en términos de los marcos normativos y jurídicos necesarios, la logística, capacitación y recursos necesarios para enfrentar a este fenómeno en las mejores condiciones y con una actualización y anticipación constantes.

CONCLUSIONES

Un primer análisis comparativo a nivel global de la evolución histórica y situación actual por
un lado, comparado con los escenarios tendencial, positivo y negativo, y sus resultados
comparados con el escenario óptimo, permiten obtener las siguientes conclusiones
generales:

·   La actuación del Estado desde sus tres poderes tradicionales y particularmente desde el Ejecutivo, debe teneruna serie de características, entre las cuales sobresalen: coherencia, integración, dirección estratégico-política unificada, permanencia en el tiempo, anticipación estratégica, intercambio fluido de información y experiencias, evaluación continua de políticas, estrategias, planes y acciones.
·     Paralela y simultáneamente, este accionar del Estado debe ser acompañado de una vinculación política, estratégica y operativa internacional, en sentido amplio. Ningún país, por sí solo, puede controlar a este flagelo.
·      La selección de los “blancos” (es decir, los focos sobre los cuales se operará prioritariamente) deben ser aquellos que impacten fuertemente en las organizaciones dedicadas al narcotráfico.
·       En otras palabras, debe actuarse sobre sus estructuras principales (liderazgo, gestión, logística, finanzas, etc.) con prioridad, sin dejar de lado la presión continua sobre los sistemas de distribución y comercialización. 
·    Se puede concluir también que el mayor esfuerzo debe estar orientado a la producción de Inteligencia Estratégica de Anticipación y a los análisis y evaluaciones de escenarios de futuro (aplicación en ambos casos de la prospectiva estratégica a dichos fines) y sus impactos posibles y consecuencias, buscando una adecuada gestión de riesgos y prevención. La mera acción represiva sin estos apoyos no permite controlar y mucho menos erradicar el fenómeno.
·         Deben crearse una serie de instrumentos y facilidades que permitan anticiparse y conocer profundamente el accionar de las organizaciones y personas dedicadas al narcotráfico.
·        En particular, una adecuada y muy bien diseñada Infraestructura de Análisis Estratégico y de Inteligencia, que permita cruzar, organizar, estructurar y reestructurar datos e información especialmente obtenida y adecuadamente incorporada a dicha infraestructura se convierte en imprescindible. El mero uso de bases de datos administrativos o simplemente estandarizados no es útil ni suficiente.

Se han observado una serie de falencias entre las facilidades y vinculaciones operativas de la agencias gubernamentales que tienen vinculación con este fenómeno. A modo de ejemplo, citamos:

·         Carencia de coordinación en el sistema de seguridad, con referencia a este tema.
·         Carencia de un sistema de análisis (Inteligencia y análisis estratégico) que sea alimentado continuamente por todas las agencias.
·         Carencia de un sistema de información eficiente durante y sobre el desarrollo de las causas judiciales.
·         Carencia de coordinación con AFIP y Aduanas (por ejemplo en relación con el lavado de activos). 
·         Del mismo modo con otros organismos relacionados o vinculados.
·         Carencia de información migratoria confiable sobre corrientes no limítrofes que vienen instalándose en el país desde hace más de 15 años.

SUGERENCIAS Y MENCIONES

En este acápite se asientas una serie (incompleta, por cierto) de sugerencias y menciones que surgen a este equipo de consultores a la luz de lo investigado, y de las experiencias recogidas en otras latitudes.

Estas sugerencias y menciones constituyen un primer esbozo orientado a reconocer inicialmente “qué debería hacerse”, pero que deberá ser consensuado, perfeccionado y operacionalizado adecuadamente.

Al mismo tiempo, explicitamos que de ninguna manera se avanzará sobre el “cómo hacerlo”, tarea que consideramos es posterior a este estudio.

·  Lograr un alto nivel de coordinación, dirección integral y operación armónica de las políticas, estrategias y acciones desarrolladas para prevenir y erradicar el narcotráfico y el consumo.
·    Desarrollar un sistema integrado de inteligencia estratégica de anticipación, que disponga para su accionar de una muy eficiente infraestructura de análisis estratégico y de inteligencia. 
·    Revisar, modernizar y desarrollar patrones normativos y de procedimientos acordes con la dinámica operativa (especialmente de prevención) de la política anti narcotráfico. 
·     Desarrollar la logística, capacitación, entrenamiento y tecnología necesaria para una operación eficiente, tanto en enfoques preventivos como de respuesta. 
·   Desarrollar áreas específicas de análisis preventivo que faciliten el desarrollo y aplicación de políticas, estrategias y acciones respecto del narcotráfico. A modo de ejemplo, se citan: inteligencia tecnológica; inteligencia normativa; inteligencia científica (en particular, química y similares)
·    Lograr el establecimiento y operación continua de alianzas internacionales con organismos similares o apropiados para intercambio de información, experiencia y operaciones conjuntas y combinadas.
·       Realizar estudios en profundidad, con foco en los riesgos y oportunidades de significado estratégico sobre distintas alternativas de políticas y estrategias, antes de tomar decisiones que pueden parecer aceptables pero no tengan un resultado favorable suficientemente asegurado. Nos referimos, por ejemplo, a la liberación del consumo de ciertas drogas; a los focos principales de aplicación de políticas y estrategias; a los “modus operandi” a ser aplicados, tanto en política preventivas como correctivas; etc.
·   Mantener un equipo de análisis adecuadamente entrenado que realice permanentemente el estudio y evaluación de diversos escenarios de futuro, como de los posibles eventos de ruptura y de los impactos de transformación de políticas, estrategias y acciones a ser aplicadas.


ESCENARIO TENDENCIAL

El escenario tendencial responde a la pregunta: ¿Qué sucederá a futuro si todo sigue comportándose de la misma manera que en el pasado?

Se construye a partir de los diagnósticos de evolución histórica y de situación actual de cada variable e indicador seleccionado. De esta manera, se generaron las tendencias de cada variable e indicador, hasta el horizonte de tiempo seleccionado, en base a los datos relevados.

(Aclaración: los escenarios futuros se redactan en "presente", tal y como si estuviéramos escribiendo una crónica en ese futuro posible)

Variables incluidas en el estudio:



Niveles de consumo de drogas:

Pese a todas las medidas y estrategias adoptadas, el consumo de drogas en Argentina sigue creciendo.
El crecimiento de drogas naturales es lento pero sostenido, y se ha incrementado mucho el consumo de fármacos y drogas sintéticas, lo que ha generado la creciente fabricación local, incluso con "saldos exportables".
Efectos:
Si bien las estimaciones indican un crecimiento, lento pero sostenido, del consumo de drogas de origen natural; éste no llega a los picos más altos de consumo evidenciados durante los años precedentes. Lo antedicho refleja que las políticas implementadas por el Estado, han logrado contener el crecimiento exponencial del consumo. 
No se logra disminuir el consumo de drogas de origen natural. 
Incremento progresivo en el consumo de drogas sintéticas y aumento de la detección y denuncia de la existencia de laboratorios ilícitos. 
El país comienza a ser identificado como uno de los principales países de producción y consumo de drogas sintéticas, aumentando la potencialidad de exportación y tráfico de insumos químicos. Consecuencias en los ámbitos de la seguridad (incremento de la violencia, detenciones, incautaciones) y la salud.


Dinámica de mercados:


Argentina aparece casi como una "zona liberada", que recibe para tratamiento final y consumo local como para exportación drogas naturales de la región cercana.
A la vez, se ha convertido en fabricador o procesador final de drogas sintéticas y de insumos para fabricarlas.
Los grandes carteles, tanto de drogas naturales como los que fueron apareciendo alrededor de las drogas sintéticas operan continuamente y con mucho poder en el país.
Efectos:
Argentina continúa siendo considerada un país de tránsito. 
Argentina podría posicionarse como productor y país de consumo de drogas naturales y, especialmente, drogas sintéticas. Los organismos internacionales alertan sobre esta situación y envían misiones de evaluación a Argentina con mayor frecuencia, ampliando las restricciones para la exportación e incluso importación de insumos (que si bien de uso dual dado que permiten la fabricación de drogas sintéticas, resultan valiosos para la producción sustancias legales, como los plásticos, productos farmacéuticos, perfumes, cosméticos y detergentes).
Potencialidad de conflicto con sectores médicos y farmacéuticos, sindicatos.


Producción de drogas por países y por tipos:


Argentina aparece casi como una "zona liberada", que recibe para tratamiento final y consumo local como para exportación drogas naturales de la región cercana.
A la vez, se ha convertido en fabricador o procesador final de drogas sintéticas y de insumos para fabricarlas. 
Los grandes carteles, tanto de drogas naturales como los que fueron apareciendo alrededor de las drogas sintéticas operan continuamente y con mucho poder en el país.
Efectos:
La problemática de drogas y narcotráfico no evidencia la gravedad que se observa en Colombia o México. Argentina sigue siendo catalogada un país de tránsito. 
Ampliación de las actividades y operaciones de grupos internacionales y organizaciones locales, que capitalizan a su favor las debilidades en los controles y legislación nacionales y fronterizos. Incremento de las exportaciones. Indicios y tendencias que podrían transformar al país en un punto de destino en cuanto a consumo y productor de drogas sintéticas.


Dinámica de cambio y adaptación de organizaciones de narcotráfico y asociados:


Las organizaciones del narcotráfico han logrado una gran libertad de acción para gobernar sus estructuras de acuerdo a las condiciones locales en cada una de sus etapas.
Permanentemente cambian sus estructuras, procedimientos y rutinas, lo que complica cada vez más a la lucha contra este flagelo.
Al mismo tiempo, su capacidad de mimetización en los distintos estratos de los mercados las hace casi "invisibles".
Efectos:
Esta suerte de “entrenamiento” en la dinámica de cambio y adaptación de las organizaciones vinculadas al narcotráfico crea serias dificultades (cuando no la imposibilidad) de desarrollar estrategias sostenidas en el tiempo y sus acciones para enfrentar este problema. Esto se observa tanto en lo vinculado al microtráfico, como al tráfico internacional de drogas (en sus distintas etapas del proceso) y sus operaciones derivadas, como el lavado de dinero.
En este sentido, los esfuerzos por obtener información necesaria para la prevención y desarticulación del narcotráfico son cada vez mayores y su logro se hace cada vez más complejo, afectando seriamente el accionar del Estado en todas sus formas.
Se observa un permanente aumento y ramificación del microtráfico, avanzando sobre zonas y sectores de las concentraciones urbanas que antes estaban relativamente libres del mismo, con una fuerte tendencia a lo que podría definirse como una masificación del fenómeno.


Dinámica de transformación, modernización, gestión y administración de operaciones:


Las organizaciones del narcotráfico han logrado una gran libertad de acción para gobernar sus estructuras de acuerdo a las condiciones locales en cada una de sus etapas. 
Permanentemente cambian sus estructuras, procedimientos y rutinas, lo que complica cada vez más a la lucha contra este flagelo.
Al mismo tiempo, su capacidad de "mimetización en los distintos estratos de los mercados las hace casi "invisibles".
Efectos:
Esta suerte de “entrenamiento” en la dinámica de cambio y adaptación de las organizaciones vinculadas al narcotráfico crea serias dificultades (cuando no la imposibilidad) de desarrollar estrategias sostenidas en el tiempo y sus acciones para enfrentar este problema. Esto se observa tanto en lo vinculado al microtráfico, como al tráfico internacional de drogas (en sus distintas etapas del proceso) y sus operaciones derivadas, como el lavado de dinero.
En este sentido, los esfuerzos por obtener información necesaria para la prevención y desarticulación del narcotráfico son cada vez mayores y su logro se hace cada vez más complejo, afectando seriamente el accionar del Estado en todas sus formas.
Se observa un permanente aumento y ramificación del microtráfico, avanzando sobre zonas y sectores de las concentraciones urbanas que antes estaban relativamente libres del mismo, con una fuerte tendencia a lo que podría definirse como una masificación del fenómeno.


Cantidad de dinero destinado a la corrupción y facilitación del tráfico.

Las organizaciones de narcotráfico disponen cada vez de mayores cantidades de dinero, con lo que desde su imagen de poder, de "invencibles" y su ejercicio de presión y miedo, alimentado todo con mucho dinero y otras formas de "pagos", aumenta sostenidamente su capacidad y su real actuación hacia la corrupción, compra de voluntades y manejos ilícitos relacionados
Efectos:
El incremento sostenido del dinero destinado a la corrupción y facilitación del narcotráfico impacta negativamente en todos los organismos, agencias e instituciones públicas y privadas que se encuentran relacionadas con el enfrentamiento contra el crimen organizado. Las organizaciones de narcotraficantes ven facilitado el accionar tanto de la producción, fabricación, distribución y comercialización de sus productos.
Se ven seriamente comprometidas las operaciones tácticas de las fuerzas de seguridad habida cuenta del compromiso de parte de sus agentes por parte de las organizaciones delictivas que ven facilitadas sus tareas de inteligencia y contrainteligencia. Asimismo, la Justicia ve comprometido su accionar y eficacia en cada una de las etapas del proceso judicial.

Características y dinámica de situaciones sociales graves:



Diversas situaciones sociales conflictivas, de necesidades extremas o de demandas insatisfechas proliferan y se mantienen.
La tendencia a la creciente conflictividad y movilización social opera como un estimulante de las mismas, y su vinculación con el narcotráfico y consumo aumenta.
Efectos:
A pesar de los esfuerzos realizados por el gobierno nacional en la contención a los sectores sociales más vulnerables, el narcotráfico logró, mediante una extendida red de reclutamiento y asistencia, arraigarse como un factor con creciente influencia en esos mismos sectores.
Esa influencia se manifiesta no solo en la participación de parte de sus miembros en el narcomenudeo, y en los crímenes directa o indirectamente asociados tales como secuestros, robos, “ajustes de cuentas” y otros.
Asimismo se ven afectadas la cohesión social, los valores esenciales relacionados con el cumplimiento de la Ley, el trabajo, la educación y, en forma notable, aquellos que se relacionan con el respeto a sus mayores y a la familia. 
La vida pierde valor frente a las necesidades generadas por el consumo de drogas de bajo valor económico pero, paradojalmente, con mayor capacidad de daño y adicción.


Vinculaciones de actividades relacionadas o formando parte del crimen organizado en todas sus formas con el narcotráfico:


Los vínculos de diversos tipos entre el crimen organizado en sus distintas formas y todo o parte de los procesos y etapas del narcotráfico se mantienen, crecen y en ciertos casos, se consolidan.
Efectos:
Si bien, dadas las características de las actividades del narcotráfico en la Argentina, la relación entre las organizaciones especializadas en esta actividad y el crimen organizado en general son escasas, la consolidación de las actividades de este tipo de crimen lleva, progresivamente, al establecimiento de lazos con otros tipos de crimen que valen de las facilidades crecientes del narcotráfico en función de una estructura de corrupción generalizada que impide el correcto funcionamiento del Estado. 

Estabilidad estructural de dirección y mutaciones operativas de las organizaciones:


Las organizaciones del narcotráfico han logrado una gran libertad de acción para gobernar sus estructuras de acuerdo a las condiciones locales en cada una de sus etapas.
Permanentemente cambian sus estructuras operativas, procedimientos y rutinas, lo que complica cada vez más a la lucha contra este flagelo. Sin embargo, sus estructuras de mando y dirección se mantienen con alto grado de permanencia. Al mismo tiempo, su capacidad de "mimetización en los distintos estratos de los mercados las hace casi "invisibles"
Efectos:
Las organizaciones de narcotráfico muestran una gran estabilidad estructural en cuanto a su dirección y posicionamiento en el mercado, como al control de sus operaciones y negocio.
Al mismo tiempo, cada vez más adquieren la flexibilidad de mutación de sus propias redes organizacionales y desempeño operativo debido a la adaptación que dichos mercados y situaciones locales les exigen.


Vinculaciones del narcotráfico con la sociedad:


Los vínculos naturales o forzados del narcotráfico con la sociedad siguen en lento pero sostenido aumento.
Efectos:
La vinculación más estrecha del narcotráfico con la sociedad deriva en una creciente tolerancia social al consumo y tráfico en pequeña escala, impactando en un aumento del consumo de drogas tanto en cantidad como en variedad.
Las organizaciones del narcotráfico ven aumentar su poder de acción e influencia, tanto por la complicidad con las mismas por parte de algunos sectores sociales, como por el temor al accionar de las mismas por parte de otros sectores.
Se incrementan significativamente para el Estado las dificultades para combatir eficazmente al narcotráfico, por las crecientes complicidades y encubrimientos hacia el mismo realizado por sectores importantes de la sociedad.


Vinculación del narcotráfico con las instituciones:


El narcotráfico ha logrado penetrar en diversas instituciones públicas y privadas, generando una situación preocupante y con tendencia a profundizarse.
Efectos:
La penetración del narcotráfico en diversas instituciones públicas genera un aumento del poder de acción de las organizaciones criminales, y una pérdida de la capacidad de acción del Estado para combatirlas, por el acceso a información privilegiada ó el aumento de la capacidad de influencia sobre las acciones de enfrentamiento al narcotráfico.
La infiltración en instituciones privadas facilita el accionar del narcotráfico en pos de sus intereses (ejemplo: situaciones tales como el desvío de precursores de parte de personal infiltrado en laboratorios ó la colaboración para el lavado de dinero).

Esfuerzos de enfrentamiento al narcotráfico y mejoras de resultados:

Si bien se incrementó el accionar contra la comercialización y el consumo, no se han obtenido grandes resultados en cuanto al desmantelamiento o descabezamiento del fenómeno.


Efectos:
El consumo y el tráfico no manifiestan grandes cambios, manteniendo una tendencia levemente creciente, producto de que no se han obtenido grandes resultados en cuanto al desmantelamiento ó descabezamiento del fenómeno. 
Los esfuerzos de prevención del consumo y de enfrentamiento a la producción y comercialización no terminan de integrarse en políticas y estrategias consistentes y de largo plazo.
Las organizaciones del narcotráfico continúan adaptándose y mutando en respuesta a las distintas acciones emprendidas por el Estado, logrando mantener su capacidad de acción más allá de los cambios.

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